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El otro día el ministro de Educación y Cultura me demostró de nuevo que no es apto para gestionar uno de los pilares de nuestra sociedad.
Sus primeras declaraciones acerca de la piratería no me lo hicieron simpático, pero entendí su postura.
El problema fue el otro día, cuando anunció los recortes en educación para el año que viene. Los profesores trabajaremos más y explicando materias que no nos corresponden. Además tendremos más alumnos/as en clase.
Esto parece tener que ver con el derecho del gobierno a "hacer caja"porque en los cajones hay telarañas. Últimamente cada viernes sabemos de algún recorte más que nos destrozará el futuro. Todos esos recortes duelen porque se clavan como agujas en el pecho de personas con cara, con corazón, que respiran y que tienen que sobrevivir.
Lo que más me duele de sus recortes es que machacarán a la juventud, que tendrá una peor formación. Pero eso no es lo peor, lo peor es que nuestro ministro de Educación ha decidido llamarnos "tontos" a la cara. Según él la educación no perderá calidad en esas condiciones.
Vamos a ver, señor Wert, ¿cómo es posible que profesores más cansados en aulas más llenas den una educación de igual calidad? Quizás el señor ministro sea mago o quizás ignore las reglas más básicas de las matemáticas.
Reflexión del día: la educación es el pilar de nuestra sociedad, destruyéndola tendremos a gente que sí creerá mentiras tan claras como las que ha dicho el ministro.
Cita del día: Lo que me preocupa no es que me hayas mentido, sino que, de ahora en adelante, ya no podré creer en ti.
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