sábado, 21 de julio de 2012

Pues yo quiero que gane España (¿soy raro?)

Llevo varios días con ganas de redactar esta entrada. Me ha sorprendido que varios de mis amigos querían que España no ganase la Eurocopa de fútbol e imagino que preferirán que se venga con el medallero a cero en las Olimpiadas.

A mí me resultó una sorpresa cuando lo leí por primera vez (porque me llegó vía e-mail). Las razones tenían que ver con que el deporte es el opio del pueblo y que si ganábamos no nos daríamos cuenta de lo mal que estábamos... no sé cuál era la razón, no me entraba en la cabeza.

Yo sí quiero que gane siempre, incluso quiero que gane Alonso y no me es simpático, pero lo prefiero a Hamilton o a Vettel. Siempre que hay un español quiero que gane (hago excepción del Barça porque mi afición por el Madrid me lo impide). Siempre que representan a España a mí me emocionan.

Me parece una chorrisandez pensar que el pueblo se va a quedar atontolinado porque ganemos la Eurocopa... creo que los problemas son tan grandes que superan al fútbol. Creo que hay mil personajillos en los mundos del corazón que también son el opio del pueblo, y también lo son algunas noticias del mundo político, y lo es el estreno de una nueva serie, y lo es... un catálogo de cosas tan largo que no voy a detallarlo.

Celebré la Eurocopa y fui a la manifestación contra los recortes del otro día (ya haré una entrada sobre el tema). Y había mucha gente en ambas. Yo quiero que gane España para tener una alegría (y para que la tengan millones de personas que lo están pasando mal). Es más, soy consciente de que dentro de diez o de doce años ya no ganaremos en nada y echaremos de menos esta época.

Reflexión del día: el deporte puede ser el opio del pueblo, pero sus efectos, actualmente, duran pocos días.

Cita del día: Las cadenas de la esclavitud atan sólo las manos, es la mente la que hace al hombre libre o esclavo.
(Franz Gillpazer)

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