sábado, 16 de noviembre de 2013

Huelga de limpieza en Madrid

Hay varios aspectos de la actual huelga de limpieza en Madrid que me hacen hablar sobre ella.

Lo primero es la fascinación que siento por los periodistas que dedican más esfuerzo y más tiempo a las noticias cuando las ven más cercanas, no cuando las ven más interesantes. Recuerdo montones de huelgas de limpieza en centenares de sitios a las que se dedicaba, escasamente, un minuto de un telediario. A día de hoy la huelga sale como una de las noticias más importantes del día en todos los telediarios. Habrá gente que diga "es que afecta a más gente" o "es que es un foco de turismo importante". Pero es que eso sucede también con los accidentes de tráfico, porque parece que solo son noticia aquellos que tienen lugar en las grandes ciudades. Tengo a veces la sensación de que la gente "de provincias" somos ciudadanos de segunda para los periodistas.

Por otra parte quiero hablar de la gente que para hacer su huelga ensucia más las calles. Eso no lo puedo entender y no se debería permitir. ¿Cómo es posible que para arreglar lo mío tenga que fastidiar a los demás? No me parece bien y punto final. Ya me duelen bastante las huelgas salvajes de algunos sectores como para que los mal llamados "piquetes informativos" se dediquen a destrozar a los demás. ¿Qué diríamos si un médico dijera que va a operar mal a una persona a propósito porque está en huelga? ¿Qué pasaría si yo, como profesor, decidiera enseñar cosas erróneas a mis alumnos/as como medio de protesta? Eso no se vería bien, pero yo tengo que aceptar que los servicios de limpieza no solo no limpien, sino que se dediquen a vaciar contenedores en la calle. Debería haber una ley muy dura contra eso.

Reflexión del día: mi derecho a la huelga no puede exceder del derecho a no trabajar.

Cita del día: "Una huelga de intelectuales, que es un supuesto improbable, paralizaría la marcha del mundo." (Camilo José Cela)